Cuando la sobrecualificación es un lastre para conseguir empleo

¿Compensa entregarse al estudio en España? ¿Sigue despreciando España la inteligencia y el esfuerzo? ¿Qué credibilidad tienen los políticos o los profesores o la sociedad cuando pide a sus jóvenes que estudien?

Ana Pastor tiene 29 años, dos carreras (Historia, rama Arqueología, y Restauración), habla inglés y francés. Vivió un año en París e hizo prácticas en el Louvre y en el instituto de Patrimonio francés. Miguel Larraz es ingeniero técnico de Diseño Industrial, cursó un máster de un año de la Escuela Elisava, de la Pompeu Fabra, domina el inglés y vivió un año en Rumania. Tiene 27 años. Lilian García, de 24, estudió Ciencias Ambientales y un máster de dos años en Copenhague en Ingeniería Química. Ha hecho seis cursos desde que se quedó en paro hace un año. Acaba de empezar otro máster.
Los tres eligieron sus carreras por vocación. Cada uno de sus currículos habla de años, dinero y esfuerzo invertidos. Siguieron el consejo más repetido por expertos y políticos para soportar la crisis: estudiar. Pero, de momento, la ventaja que creían tener no aparece por ninguna parte, y tanto Ana Pastor como Miguel Larraz buscan ya cualquier trabajo. Ayer contrataron a Ana durante mes y medio en una empresa de restauración fuera de Madrid.

Es cierto que sólo el 16,4% de los titulados (el doble que en 2008, cuando empezó la crisis) esán en paro, frente a las del 52,1% para quienes no acabaron la enseñanza obligatoria o del 33,8% entre los que cursaron Bachillerato o FP de grado medio. Pero el 44% de universitarios se emplea en trabajos que no requieren esos estudios, según el informe Panorama de la educación 2010, de la OCDE. Una sobrecualificación inútil y frustrante. Y la ventaja salarial que tenían frente a los que sólo terminan la Secundaria se ha desplomado un 40% entre 1997 y 2004, según un informe de La Caixa publicado en 2007.

"¿Que qué me planteo?". "Eliminar de mi currículo las dos carreras y enfocarlo hacia la parte de trabajos no cualificados que he hecho". "A veces veo que me descartan porque creen que voy a querer cobrar más o que lo voy a dejar pronto, en cuanto encuentre algo mejor".