Treinta
expertos del ámbito académico publican un manifiesto que busca mejorar elrendimiento de la educación en España.
El
manifiesto, que incluye ocho propuestas para mejorar el sector educativo, aboga
por un sistema con autonomía y control externo de resultados, que tenga en
cuenta las necesidades específicas de los alumnos, “uno de los retos más
importantes”, y evalúe el comportamiento de profesores, centros y estudiantes.
“El mensaje
central” del manifiesto es que todas las medidas que se tomen deben ir
encaminadas a dar más autonomía a los centros y los poderes educativos, y deben
exigir responsabilidades “para que los actos tengan consecuencias” (Antonio
Cabrales, catedrático de economía de la Universidad Carlos
III de Madrid). En ese sentido, los firmantes del manifiesto piden un mayor
control sobre los profesores y los alumnos.
“Sería útil
que el comportamiento y la disciplina de los alumnos tengan consecuencias”. El
manifiesto propone en concreto que al final de la educación primaria y
secundaria se establezcan pruebas estandarizadas “cuyos resultados tengan
efectos académicos”. También insiste en la necesidad de reforzar la autoridad
del profesorado, dado el “nivel preocupante de mal funcionamiento debido a
problemas de comportamiento” de la escuela española.
Respecto al
profesorado, los firmantes creen que se debe identificar a los buenos y malos
profesores, midiendo el rendimiento de los mismos. Es necesario incentivar al
profesorado, mediante promociones y ascensos de categoría, para evitar, tal como
explica el manifiesto, que la carrera de los profesores y los directores de
centro “dependa exclusivamente del mero paso del tiempo y de su participación
en actividades formativas regladas”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario