martes, 23 de febrero de 2010

Una opinión de 93 años.

JOSÉ CASTAÑO Profesor de Primaria.

El 1 de mayo de 1939 dos falangistas le detuvieron y condenaron a 30 años de prisión.
"Luché con el ejército republicano en el frente de Teruel durante un año. Había militado en el Partido Radical Socialista y en Unión Republicana".
Sólo pudo incorporarse como maestro meses antes de que Franco muriese en 1975. A los 58 años terminó el curso de prácticas y juró lealtad a los principios del Movimiento. Maestro de Lengua. Ahora organiza trabajos monográficos, da clases de apoyo a los alumnos más atrasados y echa una mano en secretaría con el papeleo.

Opina sobre el pacto educativo:
"He oído que pretenden recuperar la tarima para elevar la autoridad del maestro. Eso son estupideces. No creo que los niños de ahora sean peores que los de las generaciones anteriores. El problema es que no recordamos cuando nosotros éramos chiquillos. Nunca se comportarán como un adulto. Si intentas imponerles algo lo rechazarán. Se debe razonar con ellos con cariño y paciencia. Ése es el único camino para que aprendan y respeten a los docentes".

"Creo que es una buena idea porque el sistema educativo no puede cambiar constantemente en función del partido que esté en el poder. Es fundamental que eliminemos el matiz ideológico de las aulas. Deberíamos mirar el modelo francés, donde estas decisiones no las toman políticos, sino funcionarios especializados y capacitados para crear un modelo que funcione y se prolongue en el tiempo sin lastres dogmáticos".

"Dominan perfectamente las materias, pero desconocen cómo deben impartirlas en el aula porque sus periodos de prácticas son mínimos. Y de ahí derivan la mayoría de trabas con los alumnos. Los maestros deben ser capaces de convencer a los niños de que están en lo cierto argumentando. Es así como se alcanza una autoridad moral sobre los niños, que no son tontos, y lo palpan enseguida".
"Destruyeron a la mejor generación de profesores que ha tenido jamás este país, la que se formó con el Plan Profesional de la II República, aquella a la que enseñaron a enseñar".  "Y al resto, ni nos dejaron incorporarnos. Eso sí, como les hacían falta profesores, le dieron el título a muchos afectos al régimen que no habían pisado un aula en su vida" .

1 comentario:

Fidelio en el bosque animado dijo...

Interesantísima esta entrada y muchas otras. Discreto, no obstante, de alguos puntos. Empezando por las promociones de Escuelas Normales. Es cierto que muchísimos fueron depurados...pero otros hicieron lo que pudieron y se reincorporaron tras algunos años de ostracismo, como por ejemplo, mi padre.

Respecto a los niños de antes y los de ahora, en el fondo es verdad. Tal vez, lo que falla hoy en día no son sino los adultos, que pretendemos hacer de los adolescentes mercado y sujetos políticos para que integren el escenario (interesado) de los votantes...pero siguen siendo niños. No es necesario leer "El señor de las moscas", ni exagerar tanto para ver en qué fallamos los adultos. Felicidades por su blog.