Castilla y León, ¡Comunidad histórica y cultural!

El presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, proclama que la suya es una comunidad histórica y cultural. Le ha faltado sustituir comunidad por nación y así estaríamos al cabo de la cosa. ¿Qué querrá decir con eso? ¡Histórica! ¿Que su comunidad autónoma se construye hacia atrás, que las glorias del pasado, si las hubiere, llenarán los huecos que va dejando el paro, que los mohosas estatuas de los guerreros medievales ocuparán los puestos de los jóvenes que se van buscando mejor fortuna, que sumaremos los hombres que en otro tiempo existieron a los presentes para compensar la pérdida de población?

¿Y cultural? ¿Qué querrá decir semejante cosa? ¿Que otras tierras no lo son? ¿Que cultura es un barniz sobre la frente para distinguir a la tribu? Me gustaría que proclamase la excelencia educativa de la comunidad, si la hubiere, que dijese qué se hace para promocionar a los jóvenes con talento, que explicase qué límites están rompiendo las viejas universidades de Valladolid y Salamanca, o las nuevas, hasta dónde llega su excelencia, qué hitos científicos o tecnológicos alcanzarán en los próximos años, qué empresas nuevas están surgiendo para colmar el hambre de trabajo actual, para retener el talento. ¡Comunidad histórica y cultural!